domingo, 25 de marzo de 2012

El Sentido de la Pedagogia Crítica

Principios Fundamentales de la propuesta Freireana:

  • Unidad dialéctica entre teoría y práctica (lectura de la palabra y lectura del mundo) permanente contrastación de la teoría con la práctica y la experiencia.
  • Carácter abierto de la historia que posibilita su problematización y re-invención mediante la transformación por lo inédito viable, al servicio de la búsqueda del ser más. La re-invención del mundo por la posibilidad de permanente intervención en la realidad que deseamos transformar. El educador como intelectual transformativo. La esperanza crítica y consciente como motor de la transformación.
  • Sustantividad democrática de la educación: la democracia en función de la libertad conquistándose. Sustantividad que se nutre de la ética y la coherencia entre el decir y el hacer del educador/a y en la crítica de la realidad basada en la indagación científica responsable que se expresa en el compromiso ciudadano de la lucha por el bien común y la justicia social. Instauración del diálogo como instrumento de esa lucha que solidariza la reflexión con la acción. El carácter político de la educación, la esperanza activa montando la arquitectura de un socialismo democrático, que preserve de todo tipo de autoritarismo y dogmatismo o cristalización ideológica.
  • Sentido utópico de la lucha por mejorar el mundo, re-inventándolo basándose en la fe en el ser humano y amor al mundo. En su inacabamiento que lo hace sujeto porque busca crecer ontológicamente. El valor inestimable de la educación en la valoración y construcción del sujeto que busca “ser más”. Bien pensar o pensar crítico como fuente de la criticidad utópica y del diálogo democrático. Respeto a la necesaria tensión entre autoridad y libertad por parte del educador radicalmente democrático.
  • Lucha contra todo tipo de discriminación. Compromiso ineludible de todo educador/a responsable, progresista y crítico, con esta lucha, como parte de la educación para la libertad, entendiendo que no puede haber libertad cuando ciertas voces son “negadas” por sobre otras, que somos sujetos históricos siempre en función de los otros que nos constituyen.